viernes, 15 de abril de 2011

NUEVA YORK



"Nueva York concederá el don de la soledad y el don de la intimidad a cualquiera que esté interesado en obtener tan extrañas recompensas. Semejante largueza explica la presencia dentro de los límites de la ciudad de gran parte de su población, pues muchos residentes de Manhattan son personas que cogieron sus bártulos y acudieron a la ciudad en busca de asilo, del cumplimiento de sus deseos o de cualquier otro Grial de mayor o menor importancia. La capacidad de conceder tan discutibles dones es una misteriosa característica de Nueva York. Puede destruir una persona o satisfacerla, dependiendo en gran medida de la suerte.

Nadie debería venir a vivir en Nueva York a menos que tenga la intención de ser afortunado."

E.B.WHITE "Esto es Nueva York".

* E.B.White escribió estas entusiastas palabras un verano de 1.948.

La ciudad de Nueva York ha sido escenario y también protagonista de cientos de novelas, películas y canciones a lo largo de los años, hasta el punto que forma parte de nuestras vidas aunque nunca la hayamos visitado.

En mi caso voy a tener la suerte de recorrer sus calles durante los próximos 8 días cumpliendo así un sueño ansiado hace tiempo.


jueves, 7 de abril de 2011

LA GRAN COSMOPOLIS

(Meditaciones de la madrugada)

Casas de cincuenta pisos,
servidumbre de color,
millones de circuncisos,
máquinas, diarios, avisos
y ¡dolor, dolor, dolor!

Estos son los hombre fuertes
que vierten áureas corrientes
y multiplican simientes
por su ciclópeo fragor,
y tras la Quinta Avenid
a la Miseria está vestida
con ¡dolor, dolor, dolor...!

¡Sé que hay placer y que hay gloria allí,
en el Waldorff Astoria,
en donde dan su victoria
la riqueza y el amor;
pero en la orilla del río,
sé quiénes mueren de frío
y lo que es triste, Dios mío,
de dolor, dolor, dolor...!

Pues aunque dan millonario
sus sus talentos y denarios,
son muchos más los calvarios
donde hay que llevar la flor de la Caridad
divina que hacia el pobre a Dios inclina
y da amor, amor y amor.

Irá la suprema villa
como ingente maravilla
donde todo suena y brilla
en un ambiente opresor,
con sus conquistas de acero,
con sus luchas de dinero,
sin saber que allí está entero
todo el germen del dolor.

Todos esos millonarios
viven en mármoles parios,
con residuos de Calvarios,
y es roja, roja su flor.

No es la rosa que el Sol lleva
ni la azucena que nieva,
sino el clavel que se abreva
en la sangre del dolor.

Allí pasa el chino,
el ruso, el kalmuko y el boruso;
y toda obra y todo uso
a la tierra nueva es fiel,
pues se ajusta y se acomoda
toda fe y manera toda,
a lo que ase, lima y poda
el sin par Tío Samuel.

Alto es él, mirada fiera,
su chaleco es su bandera,
como lo es sombrero y frac;
si no es hombre de conquistas,
todo el mundo tiene vistas
las estrellas y las listas
que bien sábese están listas
en reposo o en vivac.

Aquí el amontonamiento
mató amor y sentimiento;
mas en todo existe Dios,
y yo he visto mil cariños
acercarse hacia los niños
del trineo y los armiños
del anciano Santa Claus.

Porque el yanqui ama sus hierros,
sus caballos y sus perros,
y su yacht y su foot-ball;
pero adora la alegría,
con la fuerza, la armonía:
un muchacho que se ría
y una niña como el sol.

RUBÉN DARÍO. Nueva York, diciembre de 1914

* Las fotografías son de Charles C. Ebbets.
 
Free counter and web stats