“Cuando se utilizan ampliadoras [...] pueden verse cosas que probablemente el ojo desnudo no sería capaz de captar [...]. El fotógrafo de BLOW UP, que no es un filósofo, quiere ver las cosas más de cerca. Pero lo que sucede es que, al ampliarlas demasiado, el objeto se desintegra y desaparece. por lo tanto, hay un momento en que asimos la realidad, pero ese momento pasa. Este es en parte el significado de BLOW UP” MICHELANGELO ANTONIONI
"Entre las muchas maneras de combatir la nada, una de las mejores es sacar fotografías, actividad que debería enseñarse tempranamente a los niños pues exige disciplina, educación estética, buen ojo y dedos seguros. No se trata de estar acechando la mentira como cualquier repórter, y atrapar la estúpida silueta del personajón que sale del número 10 de Downing Street, pero de todas maneras cuando se anda con la cámara hay como el deber de estar atento, de no perder ese brusco y delicioso rebote de un rayo de sol en una vieja piedra, o la carrera trenzas al aire de una chiquilla que vuelve con un pan o una botella de leche. Michel sabía que el fotógrafo opera siempre como una permutación de su manera personal de ver el mundo por otra que la cámara le impone insidiosa (ahora pasa una gran nube casi negra), pero no desconfiaba, sabedor de que le bastaba salir sin la Contax para recuperar el tono distraído, la visión sin encuadre, la luz sin diafragma ni 1/250. (...)
Levanté la cámara, fingí estudiar un enfoque que no los incluía, y me quedé al acecho, seguro de que atraparía por fin el gesto revelador, la expresión que todo lo resume, la vida que el movimiento acompasa pero que una imagen rígida destruye al seccionar el tiempo, si no elegimos la imperceptible fracción esencial. No tuve que esperar mucho. La mujer avanzaba en su tarea de maniatar suavemente al chico, de quitarle fibra a fibra sus últimos restos de libertad, en una lentísima tortura deliciosa. Imaginé los finales posibles (ahora asoma una pequeña nube espumosa, casi sola en el cielo), preví la llegada a la casa (un piso bajo probablemente, que ella saturaría de almohadones y de gatos) y sospeché el azoramiento del chico y su decisión desesperada de disimularlo y de dejarse llevar fingiendo que nada le era nuevo. (...)
Lo podría contar con mucho detalle pero no vale la pena. La mujer habló de que nadie tenía derecho a tomar una foto sin permiso, y exigió que le entregara el rollo de película. Todo esto con una voz seca y clara, de buen acento de París, que iba subiendo de color y de tono a cada frase. Por mi parte se me importaba muy poco darle o no el rollo de película, pero cualquiera que me conozca sabe que las cosas hay que pedírmelas por las buenas. El resultado es que me limité a formular la opinión de que la fotografía no sólo no está prohibida en los lugares públicos sino que cuenta con el más decidido favor oficial y privado. Y mientras se lo decía gozaba socarronamente de cómo el chico se replegaba, se iba quedando atrás —con sólo no moverse—y de golpe (parecía casi increíble) se volvía y echaba a correr, creyendo el pobre que caminaba y en realidad huyendo a la carrera, pasando al lado del auto, perdiéndose como un hilo de la Virgen en el aire de la mañana. (...)
La primera sorpresa fue estúpida; nunca se me había ocurrido pensar que cuando miramos una foto de frente, los ojos repiten exactamente la posición y la visión del objetivo; son esas cosas que se dan por sentadas y que a nadie se le ocurre considerar. Desde mi silla, con la máquina de escribir por delante, miraba la foto ahí a tres metros, y entonces se me ocurrió que me había instalado exactamente en el punto de mira del objetivo. Estaba muy bien así; sin duda era la manera más perfecta de apreciar una foto, aunque la visión en diagonal pudiera tener sus encantos y aun sus descubrimientos. (...)
No por buena acción la miraba entre párrafo y párrafo de mi trabajo. En ese momento no sabía por qué la miraba, por qué había fijado la ampliación en la pared; quizá ocurra así con todos los actos fatales, y sea esa la condición de su cumplimiento. Creo que el temblor casi furtivo de las hojas del árbol no me alarmó, que seguí una frase empezada y la terminé redonda. Las costumbres son como grandes herbarios, al fin y al cabo una ampliación de ochenta por sesenta se parece a una pantalla donde proyectan cine, donde en la punta de una isla una mujer habla con un chico y un árbol agita unas hojas secas sobre sus cabezas. (...)
Mi fuerza había sido una fotografía, ésa, ahí, donde se vengaban de mí mostrándome sin disimulo lo que iba a suceder. La foto había sido tomada, el tiempo había corrido; estábamos tan lejos unos de otros, la corrupción seguramente consumada, las lágrimas vertidas, y el resto conjetura y tristeza. De pronto el orden se invertía, ellos estaban vivos, moviéndose, decidían y eran decididos, iban a su futuro; y yo desde este lado, prisionero de otro tiempo, de una habitación en un quinto piso, de no saber quiénes eran esa mujer, y ese hombre y ese niño, de ser nada más que la lente de mi cámara, algo rígido, incapaz de intervención."
JULIO CORTÁZAR, fragmentos de "Las babas del diablo" , relato que inspiró "Blow up" (1.966) de Michelangelo Antonioni.
38 comentarios:
Esta película me encanta, por como se el Londres de la época y por los pantalones blancos del protagonista.
jaja, emily, a mi sus pantalones blancos siempre me resultaron un pelin horteras :D
Es tope mod!
jaja, ya lo sé, pero no puedo con los pantalones blancos, emily, será un trauma sanferminero!
En cualquie caso, hay que reconocer que David Hemmings era muy atractivo :)
Me fascinó en su tiempo.
Pero creo que era una película muy de su momento.
Ni idea de cómo ha envejecido, pero algo me dice que no vuelva a verla.
Si tienes esa sensación, Red River (a mi me pasa con algunas películas) es mejor que te quedes con su recuerdo... Yo la vi por vez primera hace un par de años, y sí que es una película de su momento... además, a pesar del envoltorio, el Londres de los 60, Yarbirds, Annushka, Jane Birkin, etc... lo cierto es que es una película muy de Antonioni, y no es un director fácil, a mi modo de ver...
Ya, pues aunque puede que pasadita (la peli), creo que la pongo para ver, ...creo que me quedan unos lewis blancos estrechos, pero debería adelgazar unos 10 kilos para ponermelos jajaja!!!
Ahora las fotos, no se amlian, se pixelizan :)
jajaja, atikus, guarda esos Levis blancos, ¡cualquier día se vuelven a poner de moda! :D
Una delicia el texto de Cortázar. Sin ser filósofo, siempre ha sido capaz de reflexionar desde la literatura sobre cuestiones tan fundamentales como ésta, la de la percepción de la realidad. Al leer el post he pensado dos cosas: esa peli tengo que verla y de mañana no pasa que me compre una cámara :-)
Un beso!
Otro beso para ti, antígona... yo tengo un poco abandonada la fotografía (más allá de hacer fotos a mis amigos o a grupos de música), pero leyendo cosas como esta también se me despiertan las ganas de nuevo...
Me pareció de una pedanteria insufrible.
Hoola!!
Qué gran película, yo la ví el año pasado por primera vez, y aunque es verdad que es muy de la época, el Swinging London, los mods, etc. (que me encanta, los pantalones blancos no tanto) yo creo que no ha envejecido nada mal. Más allá de la estética, tiene ese algo de Antonioni que comentabas antes. Pretenciosa a raudales, intelectual que quiere unir fuerzas con los movimientos juveniles, pero muy buena. Y qué banda sonora (!!!!) Yardbirds, Tomorrow, y el gran Herbie Hancock
Tiene cierto (leve) aire de familiaridad con Las Reglas de Juego, de Renoir. Hay un momento fundamental en la película, en el cual uno de los protagonistas observa con unos prismáticos a una pareja, que son su mujer y el que presumiblemente es su amante, o eso cree el hombre. Pero, en realidad, está sucediendo lo contrario de lo que él cree. Conclusión: eso de que una imagen vale más que mil palabras es una falacia. Las imágenes no matizan.
Aunque en Blow up habría que decir que es el ojo quien miente.
Por cierto ahora que me acuerdo. El otro día se comentó la película a tres que hicieron Wong Kar Wai, Steven Soderberg y el propio Antonioni, pues bien, la parte de Antonioni es LAMENTABLE. De verdad, horrible, de salirse del cine. Más que por la pedantería, es senil. De intectual venido a viejo verde... en fin... La película se llama Eros, y donde Wong kar Wai hace erotismo, Antonioni hace el ridículo.
Pero bueno, Blow up me gusta, incluso con su pedantería, también muy de intelectual de la época.
jesús miguel, lo que dije antes, a Antonioni se le ama o se le detesta... yo reconozco que estoy en un punto intermedio, tengo un amigo entusiasta que me intenta convencer, pero para algo soy desconvencida :D
Sisi, alain, precisamente ese es el momento que he intentado recoger en este post, aunque el texto de Cortázar (del que Antonioni saca la idea para esa escena) es bastante más largo y no sé si se entiende bien así de "cortado"... Yo siempre digo que, salvo raras excepciones, lo de que una imagen vale más que mil palabras tampoco me lo creo.
En cuanto a "Eros", como ya creo que dije quí el otro día tampoco la he visto, en su momento me llamó la atención pero precisamente escuché que era tan irregular, curiosamente la misma crítica: Antonioni fatal, Soderberg regular, y Wong Kar Wai bien, que me dió pereza... como me dijísteis que la parte mejor era la de WKW lo que estoy haciendo es bajarme esa parte directamente... ya os diré qué tal.
La escena que he comentado es de Las Reglas del Juego... ya ves como se parece a la de Blow Up, aquélla es mucho más sutil, eso sí! Renoir es mucho Renoir.
El texto de Cortázar, en su línea, muy bueno!! lo leí después de haber visto la peli.
En cuanto a la mula: el corto de Soderberg, vaya, no sé si merece mucho bajársela!!
Esto me pasa por leer tan deprisa, alain! Tenía pensado bajarme también "Las Reglas del juego", es una de las que tengo pendientes de Renoir.
El que me estoy bajando es el corto de Wong Kar Wai, "La mano", que por lo visto es el mejor...
Por cierto, alain, a ver si te animas a hacer tu un blog, recuerdo que el sábado dijiste que igual lo hacías, o que al menos pensabas en ello ;)
A ver si me animo sí!! Soy un poco perezoso, lo admito.
palabra verificación: evoboxy
Sería un gran nombre para un grupo glam, ¿verdad?
por cierto, la película de Renoir es La Regla del juego, y no, como no paraba de repetir Las Reglas del juego.
Animate alain, seguro que acabamos aprendiendo cosas interesantes de ti ;) (no te quiero presionar, jeje).
jajaja, sería un gran nombre.
La regla del juego es una de las películas más extraordinarias que he visto nunca. Para mí, es la mejor de Renoir y una de las 3 ó 4 imprescindibles de la historia del cine. Aunque no puedo explicar en qué consiste exactamente su fascinación. El cine de Renoir es de una extraña perfección. Le pasa quizá lo que a Rossellini. Pero el magnetismo que destilan las películas de ambos es inapresable, difícil de describir.
Nada, que me habéis convencido, ¡la tengo que ver!
:)
Tarta, intentaré responder a lo que me has preguntado antes en otro post cuando saque un minuto, mañana me voy de vacaciones unos días y no doy a basto de trabajo!
y yo sin verla y sin poder opinar...
pero te dejo un beso
Seguro que acabas viéndola un día de estos, Paula.
Otro beso para ti :)
o.k. louise brooks.
estoy con Emily, la cantidad de cosas que inspiró esta peli, me acuerdo de la portada del single de The Smiths el "How Soon is now" con una foto de Blow up. enhorabuena descon, como se aprende.
Es que las portadas de los Smiths eran muy peliculeras, Belle, al menos algunas, la famosa "The queen is dead" está protagonizada por Alain Delon nada menos...
Yo también aprendo mucho de vosotros, Belle, lo digo totalmente en serio :)
No sabía ésto de la portada de los Smiths.... curioso.
La peli es algo fuera de serie, quizá la primera vez que se ve te deja un poco frío, pero gana muchísima con sucesivos visionados. Y qué guapa estaba la Redgrave y qué mal ha envejecido esta mujer... y, joder, salen los Yardbirds de la tercera formación a tope de feedback!!!!
Once the Mod, always the Mod!!
Ah, y la banda sonora de H. Hancock es otro must. Es que lo tiene todo esta peli: levis blancos, la Birkin en pelotas, el Jeff Beck destrozando la guitarra, levis blancos con botin ingles negro, unas modelos twiggies que quitan el hipo, levis blancos con botin ingles negro y cinturón hebillón, lo tiene todo...
Casi es para empezar la película por el final, estoy con mondo gitane: los Yardbirds se salen.
Fetiche sixties 100%, el cartel de la peli decora mi estudio sobre papel de pared multicolor. Más allá de todo este universo estético super cool muy fascinante, creo que como película, ciñiéndonos a su calidad intrínseca, ha sido algo sobrevalorada. Yo nunca la he llegado a tomar demasiado en serio, puede que tenga algo que ver que durante años tuviera la versión original subtitulada y no terminaba de convencerme. Tengo pendiente un nuevo visionado, pues hace ya unos años que no la he vuelto a ver.
¡qué entusiasta, mondo gitane! :)A mi sí que me gusta como ha envejecido Vanessa Redgrave...
Xabipop, quizás es mejor hacer como Rio Rojo y quedarte con la impresión que tienes de la película...
La película es genial adaptando un cuento imposible de adaptar,... hace con él algo parecido al protagonista con el trozo de guitarra que tira Jeff Beck en un arrebato. Menuda escena.
Vanessa Redgrave es fantástica, cada día más (no es convencimiento, es dogma de fe).
1.- viva cortázar
2.- viva antonioni (aunque sinceramente hay otras pelis de él que me gustan mas)
¿cuáles son tus preferidas de él, Rayuela?
Blow up me gusto mucho, pero también El eclipse, la noche, la aventura, tambien "le amiche", pero creo que porque está rodada en Torino!
¿has visto "El desierto rojo"? También está muy bien...
sí, sí, la he visto! es que este curso hice un seminario sobre antonioni!
Besos
Serías la envidia de un amigo mío... a él le chifla Antonioni :)
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