miércoles, 31 de mayo de 2006

PAUL AUSTER PREMIO PRÍNCIPE DE ASTURIAS DE LAS LETRAS 2.006



Este es mi particular homenaje a mi escritor favorito, Paul Auster, al que le han concecido hoy el Premio Príncipe de Asturias de las Letras 2.006, un premio merecido a toda su obra. Qué mejor que unas letras suyas para celebrarlo:

"Creo que el mundo está lleno de historias, que nuestras vidas están llenas de historias, pero que sólo en determinados momentos somos capaces de verlas o entenderlas. Hay que estar dispuesto a hallar el sentido de lo que te está ocurriendo. Casi todos nosotros, yo mismo incluido, vamos por la vida sin prestar mucha atención. De pronto ocurre una crisis, y nos cuestionamos todo lo que nos rodea, y en ese momento dejamos de pisar terreno firme. Creo que es en esos momentos que la memoria se convierte en una poderosa fuerza de nuestras vidas. Comienzas a explorar el pasado, e invariablemente te encuentras con una nueva lectura de ese pasado, lo entiendes de una manera nueva, y por ello eres capaz de enfrentarte al presente de una manera nueva".

"En el fondo, creo que mi obra procede de una situación de intensa desesperación personal, de una manera profundamente pesimista y nihilista de ver el mundo, del hecho de que seamos mortales y efímeros, de la insuficiencia del lenguaje, de lo aislados que vivimos de los demás. Y sin embargo, al mismo tiempo, he querido expresar la belleza y extraordinaria felicidad de sentirse vivo, de respirar, la alegría de estar vivo dentro de tu propia piel. Conseguir arrancar palabras de todo esto, por insuficientes que puedan ser, es la esencia de todo lo que he hecho. Lo que quiero decir es que eso tiene importancia. Y los personajes que aparecen en mis libros luchan por cosas que les importan. Nunca he sido capaz de escribir acerca de lo que parece interesar a la mayor parte de novelistas: lo que podríamos denominar el factor sociológico, el mundo de cosas que nos rodean, el mundo de gustos y modas. Mi literatura es más simple que eso, es más profunda, es, probablemente, mucho más ingenua. Trata de vivir y morir y hallarle un sentido a lo que hacemos en este mundo. Todas las preguntas fundamentales que te haces cuando tienes quince años, intentar aceptar el hecho de que vives en este planeta, encontrar alguna razón para existir. Éstas son las preguntas que impulsan a mis personajes. De alguna manera, creo que es el elemento de mis novelas que les vincula con mi obra poética, y el motivo por el que pienso en mi obra como un todo continuo y no como dos movimientos diferenciados. Por eso a veces me cuesta considerarme novelista. Cuando leo a otros novelistas, por mucho que admire su obra, por mucho que me impresione lo que son capaces de expresar, me sorprende lo poco que tienen que ver con lo que yo intento hacer. Supongo que con el tiempo he acabado considerándome, más que un novelista, alguien que cuenta historias. Creo que las historias son el alimento básico del alma. No podemos vivir sin historias. De una manera u otra, toda persona se alimenta de ellas desde que tiene dos años hasta que muere. La gente no tiene por qué leer necesariamente novelas para satisfacer su ansia de historias. Ve la tele o lee tebeos o va al cine. Les lleguen como les lleguen, estas historias son cruciales. A través de las historias luchamos por hallarle sentido al mundo. Eso es lo que me hace seguir adelante: lo que justifica que me pase la vida encerrado en una pequeña habitación, poniendo palabras sobre el papel. El mundo no se derrumbaría si no volviera a escribir otro libro. Pero a fin de cuentas, no creo que sea una actividad completamente inútil. Formo parte de la gran empresa humana que intenta encontrar sentido a lo que hacemos en este mundo. En el proceso de escribir hay muchos momentos de desolación, muchos momentos en que te preguntas por qué lo haces y qué sentido tiene: a veces es importante recordar que no lo haces en vano. Ésta es la única cosa que he encontrado que para mí tiene sentido".


PAUL AUSTER. Experimentos con la verdad.

BUSHIDO


"El silencio de un hombre /Le samouraï" (1.967) es una fantástica película de Jean Pierre Melville, protagonizada por el guapísimo Alain Delon, película de la que Jim Jarmush hizo algo parecido a un remake con "Ghost dog" (1.999). Su protagonista, Jeff Costello (Delon) es un asesino a sueldo que se rige por las reglas del Bushido o Camino del Samurai y que se verá envuelto en una trampa mortal contra su persona, de la que tendrá que zafarse poniendo en práctica todas sus habilidades.


BUSHIDO


1. GI - Honradez y Justicia

Sé honrado en tus tratos con todo el mundo. Cree en la Justicia, pero no en la que emana de los demás, sino en la tuya propia.

Para un auténtico samurai no existen las tonalidades de gris en lo que se refiere a honradez y justicia.

Sólo existe lo correcto y lo incorrecto.

2. YU - Valor Heroico

Álzate sobre las masas de gente que temen actuar. Ocultarse como una tortuga en su caparazón no es vivir.

Un samurai debe tener valor heroico. Es absolutamente arriesgado. Es peligroso. Es vivir la vida de forma plena, completa, maravillosa. El coraje heroico no es ciego. Es inteligente y fuerte.

Reemplaza el miedo por el respeto y la precaución.

3. JIN - Compasión

Mediante el entrenamiento intenso el samurai se convierte en rápido y fuerte. No es como el resto de los hombres. Desarrolla un poder que debe ser usado en bien de todos.

Tiene compasión. Ayuda a sus compañeros en cualquier oportunidad. Si la oportunidad no surge, se sale de su camino para encontrarla.

4. REI - Cortesía

Los samurai no tienen motivos para ser crueles. No necesitan demostrar su fuerza. Un samurai es cortés incluso con sus enemigos. Sin esta muestra directa de respeto no somos mejores que los animales.

Un samurai recibe respeto no solo por su fiereza en la batalla, sino también por su manera de tratar a los demás. La auténtica fuerza interior del samurai se vuelve evidente en tiempos de apuros.

5. MEYO - Honor

El Auténtico samurai solo tiene un juez de su propio honor, y es él mismo. Las decisiones que tomas y cómo las llevas a cabo son un reflejo de quien eres en realidad.

No puedes ocultarte de ti mismo.

6. MAKOTO - Sinceridad Absoluta

Cuando un samurai dice que hará algo, es como si ya estuviera hecho. Nada en esta tierra lo detendrá en la realización de lo que ha dicho que hará.

No ha de "dar su palabra." No ha de "prometer." El simple hecho de hablar ha puesto en movimiento el acto de hacer.

Hablar y Hacer son la misma acción.

7. CHUGO - Deber y Lealtad

Para el samurai, haber hecho o dicho "algo", significa que ese "algo" le pertenece. Es responsable de ello y de todas las consecuencias que le sigan.

Un samurai es intensamente leal a aquellos bajo su cuidado. Para aquellos de los que es responsable, permanece fieramente fiel.

Las palabras de un hombre son como sus huellas; puedes seguirlas donde quiera que él vaya.

Cuidado con el camino que sigues.


* Por cierto, me acabo de enterar de que Paul Auster es finalista al Premio Principe de Asturias de las Letras 2.006, ¡a ver qué pasa mañana!

martes, 30 de mayo de 2006

EL HOMBRE ELEFANTE/MÁSCARA

*John Hurt caracterizado como Joseph Merrick.

"El hombre elefante" (1.980) de David Lynch, está basada en la vida de Joseph Merrick, que nació en Londres en 1.862 y falleció, a los 27 años, en 1.890. Joshep Merrick sufría del llamado "Síndrome de Proteo", una enfermedad muy rara que le causaba tumores por todo el cuerpo, así como graves deformidades en la cara y en el brazo derecho. La historia de su vida es realmente espeluznante y muy triste, la podéis leer aquí.

La película de Lynch habla de la vida de Merrick desde el encuentro que éste tuvo con el Doctor Treeves, del London Hospital, y que en cierta manera cambió su vida, ya que supuso dejar atrás, al menos en parte, las humillaciones sufridas en ferias y circos y empezar a ser reconocido como la persona sensible y culta que era, aunque siempre ante el asombro de la alta clase inglesa, para la que, en cierta forma, seguía suponiendo una excentricidad de la Naturaleza.

Había visto esta película hacía mucho tiempo, y el otro día me puso la piel de gallina de nuevo. Todo lo que Lynch retrata en ella se puede resumir en lo que dice el propio Merrick en un momento dado: "La gente tiene miedo de lo que es diferente".

* El verdadero Joseph Merrick

"Máscara" (1.985) de Peter Bogdanovich, es una película a la que tengo especial cariño ya que la primera vez que la ví en televisión me emocionó mucho, y desde entonces la he visto unas cuantas veces más. Habla de los problemas a los que se tiene que enfrentar un adolescente aquejado de una enfermedad similar a la de John Merrick, que le deforma los huesos de la cara y le provoca enormes jaquecas, y de cómo sobrelleva a esta circunstancia lo mejor posible con la ayuda de su madre y de sus amigos. El protagonista, Rocky, de 16 años, sueña con hacer un viaje por Europa con su mejor amigo. Su madre (interpretada por Cher en el mejor papel que yo le he visto hacer en una película) intenta hacerle la vida más fácil, a pesar de sus circunstancias económicas y de sus propios problemas personales, arropada por una pandilla de moteros de pinta temible pero de gran corazón, que acogen a Rocky como a uno más. Pese a lo que podría haber sido, no es una película sensiblera (aunque sí emocionante), Bogdanovich trata el tema de una manera muy directa y valiente.

lunes, 29 de mayo de 2006

SAILOR Y LULA



This whole world is wild at heart and weird on top

A mi lado más hortera (que también lo tengo,jaja) le encanta el final de "Corazón salvaje" (1.990) de David Lynch. Sailor (Nicolas Cage), enfundado en su chupa de piel de serpiente, salta de coche en coche hasta llegar al descapotable de Lula (Laura Dern) y una vez allí ambos se abrazan sobre el capó mientras él (con la ayuda de la voz de Elvis) le canta Love me Tender.

- "¿Sabes lo que más me gusta, cariño? - preguntó Lula mientras Sailor abandonaba Lafayette camino del Lago Charles.
- ¿Qué es, almendrita?
- Cuando me hablas bonito.
- Eso es fácil - rió Sailor - Cuando estaba en Pee Dee lo único que me animaba era pensar en tí. Naturalmente, en esos ojazos grises, pero sobre todo en esas piernas delgadas. "

BARRY GIFFORD

domingo, 28 de mayo de 2006

LA CONJURA DE LOS NECIOS


Hoy voy a hablar del que sin duda es uno de mis libros favoritos (mío y de mucha gente que conozco), "La conjura de los necios" de John Kennedy Toole. La historia de cómo su autor recibió el Premio Pulizter, 10 años después de su suicidio es realmente triste. Kennedy Toole, frustrado ante su empeño de que alguna editorial le publicada la novela (varias la rechazaron por considerarla "irreverente" y "sucia" ) y supongo que debido a sus propios problemas personales, puso fin a su vida asfixiandose en su propio coche . Su madre, Thelma, decidida a que el mundo conociera esta novela y reconociera a su hijo, consiguió finalmente su publicación, y en 1.981 (casi 20 años después de haber sido escrita) recogió el Premio Pulitzer en su nombre.


Quizás su venganza póstuma esté expresada en la genial cita que abre el libro, de Jonathan Swift:

“Cuando en el mundo aparece un verdadero genio, puede identificársele por este signo: todos los necios se conjuran contra él.”

Y qué decir de Ignatius Reilly, su protagonista. Vive en una época que no es la suya (en la que según él, brillan por su ausencia la Teología, la Geometría, el Buen Gusto y la Decencia), añora el oscurantismo de la Edad Media que no ha conocido, comparte casa con su alcohólica madre y precisamente por culpa de un accidente que tienen cuando ella conduce borracha se ve obligado a abandonar su pequeño mundo y buscar un trabajo para pagar los daños. Como si de un Henry Chinaski se tratara, Ignatius va de un trabajo a otro viéndose envuelto en las situaciones más inverosímiles.


Es un libro que puede hacerte llorar de risa ( a mi me gusta especialmente la parte en la que Ignatius protagoniza una huelga en la fábrica), pero que también deprime a ratos,por el patetismo de sus protagonistas, a más de un amigo al que se lo he dejado me ha dicho que hasta le ha puesto triste.

Aquí va un pequeño fragmento:

"Soy capaz de tantas cosas y no se dan cuenta. O no quieren darse cuenta. O hacen todo lo posible por no darse cuenta. Necedades. Dicen que la vida se puede recorrer por dos caminos: el bueno y el malo. Yo no creo eso. Yo más bien creo que son tres: el bueno, el malo y el que te dejan recorrer. El bueno lo he intentado andar y no me ha ido bien. Juro que ha sido así. De pequeño hice todo lo que consideré correcto y lo que está bendita New Orleáns, con sus acordes de ébano y sus insoportables chaquetas a rayas me inducía a hacer. Estudié profundamente y traté de trasladar mis conocimientos con pasión. Los estudiantes saben eso. También escribí encerrado en un pequeño mundo cuarto juntando frases, frustrándome ante las huidizas buenas palabras y las no menos resbaladizas imágenes, comparaciones, situaciones, personajes, diálogos. Asumí estar en ese camino porque es ese el modo como se consiguen los sueños. Al menos eso creía hasta un día, cuando tenía todo acabado y faltaba la confirmación de que había decidido bien, no hubo recompensa. No hubo zanahoria, Ahí me di cuenta de que ya estaba caminando, lejos de mi voluntad, por la otra senda. Esa que no es la buena ni la mala. Porque está claro que la buena es buena porque es una opción propia. La mala es mala porque también es tu opción. Pero la otra no es algo que hayas escogido, por lo cual no pueden decir que es ciertamente buena o ciertamente mala. Es ciertamente ajena, impropia. Por ese camino involuntario caminé, llevado de las narices, arrastrado como un palo sin poder animarme. Tuve que resignarme a ser como ellos me ordenaban, a aceptar sus juicios y sus rechazos. A comprobar una vez más que no todos pueden ver más allá de su aliento. A ser víctima de un sistema que hace de gente como yo infelices zombies o incomprendidos. Y hay que tener el espíritu muy bien templado, tal vez como acero damasquino o más, para afrontar semejante fuerza. "

JOHN KENNEDY TOOLE

sábado, 27 de mayo de 2006

EL AMOR EN LOS TIEMPOS DEL CÓLERA


" Terminaron por conocerse tanto, que antes de los treinta años de casados eran como un mismo ser dividido, y se sentían incómodos por la frecuencia con la que se adivinaban el pensamiento sin proponérselo, o por el accidente ridículo de que el uno se anticipara en público a lo que el otro iba a decir. Habían sorteado juntos las incomprensiones cotidianas, los odios instantáneos, las porquerías reciprocas y los fabulosos relámpagos de gloria de la complicidad conyugal. Fue la época en que se amaron mejor, sin prisa y sin excesos, y ambos fueron mas conscientes y agradecidos de sus victorias inverosímiles contra la adversidad. La vida había de depararles todavía otras pruebas mortales, por supuesto, pero ya no importaba: estaban en la otra orilla. "



GABRIEL GARCÍA MÁRQUEZ





* RENNÉ MAGRITTE: Les amants

viernes, 26 de mayo de 2006

EL HOMBRE RANA

Esta noticia es verídica, la saqué de una revista de los años 20 llamada "La esfera" que encontré en casa de mi abuelo hace unos años. Siempre he pensado en la dura vida que con toda seguridad llevó el llamado "Hombre Rana", convertido en atracción circense por el simple hecho de nacer con deformidades ,aunque basta con mirar la foto, sus ojos tristes lo dicen todo. No puedo sino acordarme de "Freaks"/"La parada de los monstruos" de Todd Browning (1.932) en la que se habla de la dura vida en el circo de unos "monstruos" (porque así eran considerados) de la época.

Reproduzco el texto a continuación (se puede ampliar), atención a los crueles apelativos que le dedican al pobre:




"He aquí guapamente ataviado con su jersey de seda y sus kirikis coquetones en la deforme cabezota, al ya famoso "hombre rana" que recorre actualmente toda Europa intentando batir el récord de la fealdad humana con grandes probabilidades de éxito. Como podrá observarse en la adjunta fotografía, se trata de uno de los más extravagantes caprichos que haya podido tener la madre Naturaleza. El curioso ejemplar teratológico presenta, en efecto, sorprendente analogía con el ruidoso habitante de las charcas y los pantanos. La disposición y forma de los ojos y la boca; la desigual longitud de las extremidades y la forma de las manos y pies son puramente batracianas. Y no solamente hay semejanzas morfológias entre este monstruo humano y la rana, sino que también se pueden observar en su vida y costumbres. Se pasa grandes ratos sumergido en el acuario que le sirve de lugar de ejercicios; realiza verdaderos prodigios en la natación;da saltos formidables fuera del agua para atrapar las moscas y mosquitos, y, cuando se asusta o está contento croa a la perfección.



Ahora bien, como no hay mal que por bien no venga, este ser absurdo está obteniendo grandes provechos materiales de su deformidad. Según ha declarado su actual mánager a un reportero parisiense, en los diez meses que lleva de exhibición por América y Europa ha ganado cerca de un millón de francos.
No tendrá nada de extraño que pronto veamos por aquí a tal curioso fenómeno."


* Hablando de "monstruos" y "seres absurdos", a ver si saco tiempo este fin de semana para ver "El hombre elefante" de David Lynch, que compré el otro día, mi película favorita de este director.

jueves, 25 de mayo de 2006

JUANA DE ARCO

Estoy tan impactada como la primera vez que vi "La pasión de Juana de Arco" (1.928) de Carl Th. Dreyer, sin duda la más brutal de las muchas películas que se han rodado sobre el martirio de la Doncella de Orleans. Es brutal porque está basada en las actas históricas que recogen el juicio inquisitorial al que los ingleses sometieron a Juana, una vez capturada. Careciendo de todo artificio y con una puesta en escena escasa y paradójicamente luterana (hay que tener en cuenta que aunque la película fue rodada en Francia el propio Dreyer era danés y eso se nota en todas sus películas), Dreyer hace recaer sobre los primeros planos todo el peso del dramatismo de esta película. Así, una maravillosa y emocionante Jeanne Falconetti nos hace estremecer, con sus expresiones de dignidad, de dolor, de resignación y de tristeza. Es increíble la manera de llorar que tiene esta mujer, de impotencia, de rabia y de dolor, ante aquellos que la juzgan y torturan sin piedad, ante los carceleros que se ríen de ella, que le escupen, que le rapan el pelo al cero... Pone los pelos de punta. La escena final, cuando Juana es quemada en la hoguera, también es impactante, ella no emite ni un sólo grito de dolor, su mirada sigue triste y queda fija en una bandada de palomas que surca el cielo y en la cruz que le muestra un monje piadoso.


Como ya hizo en "Dies Irae", que comenté anteriormente, Dreyer incide en lo absurdo e hipócrita de los juicios sin defensa en general, y en cómo particularmente la Iglesia los ha empleado a lo largo de los siglos para sus propios intereses, en este caso claramente políticos (no en vano entre Inglaterra y Francia se estaba llevando a cabo la Guerra de los cien años).

miércoles, 24 de mayo de 2006

DANCE ME TO THE END OF LOVE




Dance me to your beauty with a burning violin
Dance me through the panic 'til I'm gathered safely in
Lift me like an olive branch and be my homeward dove
Dance me to the end of love
Dance me to the end of love
Oh let me see your beauty when the witnesses are gone
Let me feel you moving like they do in Babylon
Show me slowly what I only know the limits of
Dance me to the end of love
Dance me to the end of love

Dance me to the wedding now, dance me on and on
Dance me very tenderly and dance me very long
We're both of us beneath our love, we're both of us above
Dance me to the end of love
Dance me to the end of love

Dance me to the children who are asking to be born
Dance me through the curtains that our kisses have outworn
Raise a tent of shelter now, though every thread is torn
Dance me to the end of love

Dance me to your beauty with a burning violin
Dance me through the panic till I'm gathered safely in
Touch me with your naked hand or touch me with your glove
Dance me to the end of love
Dance me to the end of love
Dance me to the end of love

LEONARD COHEN

martes, 23 de mayo de 2006

THE LAST PICTURE SHOW



"La última película" (1.971) de Peter Bogdanovich, recuerda a "American Graffiti" de George Lucas. Bogdanovich lanza una mirada nostálgica, a la vez que crítica y bastante realista sobre la juventud rural de los años 50 en Estados Unidos. La acción transcurre en Anarene, un desértico pueblo de Texas, en el que Duane (Jeff Bridges) y Sonny (Timothy Bottoms) afrontan el verano de su graduación. Junto con las estampas típicas de la época: pandillas cuya mayor diversión en es dar vueltas en coche hasta el cine local o el drive in, la película muestra una sociedad puritana en las formas pero bajo la que se esconden las más bajas pasiones. Llama la atención el personaje de Cybill Sheperd, que pasa de ser una jovencita inocente a una mujer manipuladora y devorahombres, que acabará poniendo en peligro la amistad de los dos protagonistas.



Tengo curiosidad por ver su continuación, "Texasville" (1.990), también de Bogdanovich.


* Por cierto, "la última película" que ven los protagonistas en el cine local (el día de su cierre) es "Río rojo" de Howard Hawks, ¡qué buena!


lunes, 22 de mayo de 2006

ON THE ROAD


"Pero entonces bailaban por las calles como peonzas enloquecidas, y yo vacilaba tras ellos como he estado haciendo toda mi vida, mientras sigo a la gente que me interesa, porque la única gente que me interesa es la que está loca, la gente que está loca por vivir, loca por hablar, loca por salvarse, con ganas de todo al mismo tiempo, la gente que nunca bosteza ni habla de lugares comunes, sino que arde, arde como fabulosos cohetes amarillos explotando igual que arañas entre las estrellas. "

JACK KEROUAC

domingo, 21 de mayo de 2006

WONG KAR WAI


En su cine el tiempo pesa; estudia el pasado, el futuro. Habla del recuerdo, de la ausencia... Hay relojes por todos los lados.

W.K.W: ¡El tiempo es tan relativo! Cada minuto vuela, pero a veces tarda realmente en marcharse. Cada acto es un momento, pero su recuerdo puede ser eterno. Eso es lo que cuenta de verdad. Por otra parte, el diálogo entre los recuerdos del pasado, el presente fugitivo y la fantasía del futuro es constante. El presente es injusto porque uno no puede competir con la memoria o la imaginación. Amamos lo que no tenemos y no tenemos lo que amamos. En este mundo, el final se convierte en el principio.


(Sacado de la entrevista publicada el 21 de Mayo de 2006 en El Semanal)

sábado, 20 de mayo de 2006

EL ÚLTIMO METRO



Al ver "El último metro" de François Truffaut (1.980) es inevitable acordarse de "Ser o no ser" de Ernest Lubitsch. Ambas tratan sobre el complicado trabajo de las compañías teatrales durante la ocupación nazi, y así, si la película de Lubitsch estaba ambientada en Polonia, en este caso nos encontramos en el París ocupado de 1.944. Marion Steiner (una bellísima Catherine Deneuve) trata de sacar adelante el Teatro Montmartre, a la vez que esconde a su marido (dramaturgo y director del Teatro) en el sótano del mismo, ya que por su condición de judío se siente amenazado. Con la ayuda de éste y de un joven actor miembro de la Resistencia (Gerard Depardieu) pondrán en escena una obra llamada "La desaparecida", a pesar de los contínuos obstáculos por parte de la censura colaboracionista con los nazis.

viernes, 19 de mayo de 2006

MATAR UN RUISEÑOR

Viendo "Matar un ruiseñor" (Robert Mulligan 1.962) , basada en la genial novela de Harper Lee, ¿quien no ha soñado con tener un padre como Atticus Finch?

"Atticus Finch no hacía nada que pudiera despertar la admiración de nadie: no cazaba, no jugaba al póker, no pescaba, no bebía, no fumaba... Se sentaba y leía.

(...)

Cuando nos dió nuestros rifles de aire, Atticus no nos enseño a disparar. Fue el tío Jack quien nos instruyó en sus principios, dijo que Atticus no estaba interesado en armas. Atticus le dijo a Jem un día,
-Prefiero que disparen a las latas vacías en el patio trasero, pero se que ustedes van tras los pájaros. Dispara a todos los pájaros azules que quieras, si es que les puedes acertar, pero recuerda que es un pecado matar un ruiseñor-.
Ese fue el único momento que escuché a Atticus decir que era un pecado hacer algo, y le pregunté a la señorita Maudie al respecto. -Tu padre tiene razón-, me dijo ella. Los ruiseñores no hacen otra cosa que crear música para que la disfrutemos. No se comen los jardines de la gente, no hacen nidos en los graneros, no hacen otra cosa que cantar su corazón para nosotros. Es por eso que es un pecado matar a un ruiseñor. "


jueves, 18 de mayo de 2006

CRÓNICAS DE MOTEL



Si todavía rondaras por aquí
Te cogería
Te sacudiría por las rodillas
Te soplaría aire caliente en ambas orejas

Tú, que podías escribir como una Pantera
Todo lo que se te metiera en las venas
Qué clase de verde sangre
Te arrastró a tu destino

Si todavía rondaras por aquí
Te desgarraría hasta meterme en tu miedo
Te lo arrancaría
Para que colgara como un pellejo
Como jirones de miedo

Te daría la vuelta
Te pondría de cara al viento
Doblaría tu espalda sobre mi rodilla
Masticaría tu nuca
Hasta que abrieras tu boca a esta vida

SAM SHEPARD

31/1/80
Homestead Valley, Ca.

miércoles, 17 de mayo de 2006

CASABLANCA



"Casablanca" (Michael Curtiz, 1.942) es una de las películas sobre las que más se ha escrito. Un clásico total, que casi todo el mundo ha visto varias veces, pero por el que no pasa el tiempo. Esta historia de amor imposible tiene momentos realmente emocionantes, como cuando todos los refugiados europeos que esperan ansiosos su pasaje hacia América cantan La Marsellesa y hacen callar así a los militares alemanes. Personalmente me quedo con el personaje de Rick, interpretado por Humphrey Bogart, un tipo duro por fuera y en el fondo, como le dice Capitán Renault (un genial Claude Rains) todo un sentimental, que a pesar de todo el dolor y el rencor que lleva dentro, renuncia a la mujer que ama para conseguir que ella se salve y así favorecer a la Resistencia.






Como toda película mítica, "Casablanca" tiene frases inolvidables: "Siempre nos quedará París",etc... De todas ellas, yo me quedo con este diálogo:


Ilsa: La última vez que nos vimos...

Rick: Fue en La Belle Aurore.

Ilsa: Lo recuerdas... Fue el día en que los alemanes entraron en París.

Rick: Un día así no se olvida.

Ilsa: No.

Bogart : Recuerdo cada detalle. Los alemanes vestían de gris, y tú de azul".

martes, 16 de mayo de 2006

CAZADOR DE CREPÚSCULOS



Si yo fuera cineasta me dedicaría a cazar crepúsculos. Todo lo tengo estudiado menos el capital necesario para la safari, porque un crepúsculo no se deja cazar así nomás, quiero decir que a veces empieza poquita cosa y justo cuando se lo abandona le salen todas las plumas, o inversamente es un despilfarro cromático y de golpe se nos queda como un loro enjabonado, y en los dos casos se supone una cámara con buena película de color, gastos de viaje y pernoctaciones previas, vigilancia del cielo y elección del horizonte más propicio, cosas nada baratas. De todas maneras creo que si fuera cineasta tendría las mismas exigencias que con la palabra, las mujeres o la geopolítica.

No es así y me consuelo imaginando el crepúsculo ya cazado, durmiendo en su larguísima espiral enlatada. Mi plan: no solamente la caza, sino la restitución del crepúsculo a mis semejantes que poco saben de ellos, quiero decir la gente de la ciudad que ve ponerse el sol, si lo ve, detrás del edificio de correos, de los departamentos de enfrente o en un subhorizonte de antenas de televisión y faroles de alumbrado. La película sería muda, o con una banda sonora que registrara solamente los sonidos contemporáneos del crepúsculo filmado, probablemente algún ladrido de perro o zumbidos de moscardones, con suerte una campanita de oveja o un golpe de ola si el crepúsculo fuera marino.

Por experiencia y reloj pulsera sé que un buen crepúsculo no va más allá de veinte minutos entre el clímax y el anticlímax, dos cosas que eliminaría para dejar tan sólo su lento juego interno, su calidoscopio de imperceptibles mutaciones; se tendría así una película de ésas que llaman documentales y que se pasan antes de Brigitte Bardot mientras la gente se va acomodando y mira la pantalla como si todavía estuviera en el ómnibus o en el subte. Mi película tendría una leyenda impresa (acaso una voz off) dentro de estas líneas: "Lo que va a verse es el crepúsculo del 7 de junio de 1976, filmado en X con película M y con cámara fija, sin interrupción durante Z minutos. El público queda informado de que fuera del crepúsculo no sucede absolutamente nada, por lo cual se le aconseja proceder como si estuviera en su casa y hacer lo que se le dé la santa gana; por ejemplo, mirar el crepúsculo, darle la espalda, hablar con los demás, pasearse, etc. Lamentamos no poder sugerirle que fume, cosa siempre tan hermosa a la hora del crepúsculo, pero las condiciones medievales de las salas cinematográficas requieren, como se sabe, la prohibición de este excelente hábito. En cambio no está vedado tomarse un buen trago del frasquito de bolsillo que el distribuidor de la película vende en el foyer".

Imposible predecir el destino de mi película, la gente va al cine para olvidarse de sí misma, y un crepúsculo tiende precisamente a lo contrario, es la hora en que acaso nos vemos un poco más al desnudo, a mí en todo caso me pasa, y es penoso y útil; tal vez que otros también aprovechen, nunca se sabe.


JULIO CORTÁZAR. "Un tal Lucas"



Como el cielo vacío, carece de límites,

pero está en su lugar, siempre profundo y claro.

Cuando tratas de conocerlo, no puedes verlo.

No puedes agarrarlo,

pero no puedes perderlo.

Al no poderlo tomar, lo tomas.

Cuando callas, habla;

cuando hablas, calla.

El gran portón esta abierto de par en par para dar limosnas,

y ninguna multitud bloquea el camino.

CHENG-TAO KE. "El Camino Del Zen" de Alan W. Watts


* FELICIDADES J.J.*

lunes, 15 de mayo de 2006

EL GUARDIÁN ENTRE EL CENTENO



Éste es uno de esos libros que marcan tu adolescencia, al menos pienso que es un libro ideal para leer en esos confusos años, ¿quien no se iba a sentirse identificado con Holden Caulfield y su rebeldía frente al mundo? Lo leí varias veces entonces y algún día de éstos lo tengo que retomar, aunque supongo que será una experiencia distinta leerlo más de 10 años después de la primera vez.

Por otra parte, siempre me ha hecho gracia el halo de malditismo que rodea a esta novela, simplemente por el hecho de que Mark David Chapman la llevara en su bolsillo aquél 8 de Diciembre de 1.980, en el momento en que asesinaba a John Lennon frente al Edificio Dakota (también maldito para muchos) en Nueva York.

"Si de verdad les interesa lo que voy a contarles, lo primero que querrán saber es dónde nací, cómo fue todo eso de mi infancia, que hacían mis padres antes de tenerme a mí, y demás idioteces, estilo David Copperfield; pero no tengo ganas de contarles nada de eso. Primero, porque es un aburrimiento, y segundo porque a mis padres les daría un infarto si yo me pusiera acá a hablar de su vida privada. Para esas cosas son especiales, sobre todo mi padre. Son buena gente, no digo que no, pero a quisquillosos no les gana nadie.

Además, no se crean que voy a contarles mi autobiografía con todos los detalles. Sólo voy a hablarles de una cosa loca que me pasó la última Navidad, antes que me quedara tan débil que tuvieran que mandarme acá a reponerme un poco. A D.B. tampoco le he contado mucho más, y eso que es mi hermano. Vive en Hollywood. Como no está muy lejos de este antro, me viene a ver casi todos los fines de semana. El será quien me lleve a casa cuando salga, quizás el mes que viene. Acaba de comprase un 'Jaguar', uno de esos cacharros ingleses que levantan a doscientas millas por hora como si nada. Como cuatro mil dólares le ha costado. Está lleno de plata, el tipo. Antes no. Cuando vivía en casa era solamente un escritor común y corriente. Por si no saben quién es, le diré que escribió El pececito secreto, que es un libro de cuentos de primera. El mejor de todos es el que se llama igual que el libro. Se trata de un niño que tiene un pez y no se lo deja ver a nadie porque se lo ha comprado con su dinero. Es una historia buenísima. Ahora D.B. está en Hollywood prostituyéndose. Sin hay algo que odio en el mundo es el cine. Ni me lo nombren. "


domingo, 14 de mayo de 2006

IN THE MOOD FOR LOVE

sábado, 13 de mayo de 2006

EL MUNDO



Un hombre del pueblo de Neguá, en la costa de Colombia, pudo subir al alto cielo.
A la vuelta, contó. Dijo que había contemplado, desde allá arriba, la vida humana. Y dijo que somos un mar de fueguitos.

—El mundo es eso —reveló—. Un montón de gente, un mar de fueguitos.

Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás.

No hay dos fuegos iguales. Hay fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores. Hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento, y gente de fuego loco, que llena el aire de chispas. Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman; pero otros arden la vida con tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca, se enciende.

EDUARDO GALEANO. "El libro de los abrazos"

viernes, 12 de mayo de 2006

HIROSHIMA



" La señora Nakamura estaba de pie, mirando a su vecino, cuando todo brilló con el blanco más blanco que jamás hubiera visto. No se dió cuenta de lo ocurrido a su vecino; los reflejos de madre empezaron a empujarla hacia sus hijos. Había dado un paso (la casa estaba a 1.234 metros del centro de la explosión) cuando algo la levantó y la mandó como volando al cuarto vecino, sobre la plataforma de dormir, seguida de partes de su casa. Trozos de madera le llovieron encima cuando cayó al piso, y una lluvia de tejas la aporreó; todo se volvió oscuro, porque había quedado sepultada. Los escombros no la enterraron profundamente. Se levantó y logró liberarse. Escuchó a un niño que gritaba: "¡Mamá, ayúdame!", y vio a Myeko, la menor -tenía 5 años-, enterrada hasta el pecho e incapaz de moverse. Al avanzar hacia ella, abriéndose paso a manotazos frenéticos, la señora Nakamura se dio cuenta de que no veía ni escuchaba a sus otros niños. "

JOHN HERSEY




Él: Tú no has visto nada de Hiroshima. Nada.
Ella: Lo he visto todo . Todo .
Ella: Por ejemplo, Él hospital lo he visto. De eso estoy segura. Hay un hospital en Hiroshima. ¿Cómo iba a poder dejar de verlo?
Él: No has visto ningún hospital en Hiroshima. No has visto nada de Hiroshima.
Ella: Cuatro veces en Él museo...
Él: ¿Qué museo de Hiroshima?
Ella: Cuatro veces en Él museo de Hiroshima. He visto a la gente paseando. Todo Él mundo pasea, pensativo, por en medio de las fotografías, las reconstituciones, a falta de otra cosa, a través de las fotografías, las fotografías, las reconstituciones, a falta de otra cosa, las explicaciones, a falta de otra cosa. Cuatro veces en Él museo de Hiroshima.He contemplado a la gente. He mirado a mi vez, pensativamente, Él hierro. Él hierro quemado. Él hierro roto, Él hierro que se ha hecho vulnerable como la carne. He visto ramilletes de cápsulas, ¿quién iba a pensarlo? Pieles humanas flotantes, supervivientes, con sus sufrimientos aún recientes. Piedras. Piedras quemadas. Piedras hechas añicos. Cabelleras anónimas que las mujeres de Hiroshima encontraban enteras, caídas, por la mañana al despertarse. He tenido calor en la plaza de la Paz. Diez mil grados, en la plaza de la Paz. Ya lo sé. La temperatura del sol, en la plaza de la Paz. ¿Cómo no lo iba a saber...? La hierba, es muy sencillo...
Él: Tú no has visto en Hiroshima, nada.
Ella: Las reconstituciones se han hecho lo más seriamente posible. La ilusión, es muy sencillo, es tan perfecta que los turistas lloran. Siempre puede uno burlarse, ¿pero que otra cosa puede hacer un turista sino precisamente esto, llorar?
Ella: La suerte de Hiroshima siempre me ha hecho llorar. Siempre.
Él: No.
Ella: ¿ Qué es lo que iba a hacerte llorar? Ella: Yo vi los noticiarios. Al segundo día, dice la historia, no me lo he inventado yo, desde Él segundo día, determinadas especies animales resurgieron de las profundidades de la tierra y de las cenizas. Se fotografiaron perros. Para siempre. Los he visto . He visto los noticiaros. Los he visto. Del primer día. Del segundo día. Del tercer día.
Él (interrumpiéndola) : No has visto nada. Nada.
Ella: ... del quinceavo día también. Hiroshima se llenó de flores. Por todas partes no había más que acianos y gladiolos, y campanillas y lirios que renacían de las cenizas con extraordinario vigor, desconocido hasta entonces en las flores.
Ella: Y no me he inventado nada .
Él: Te lo has inventado todo .
Ella: Nada . De la misma manera que existe una ilusión en el amor, esta ilusión de ser capaz de no olvidar nunca, también yo he tenido la ilusión ante Hiroshima de que jamás olvidaría. Igual que en el amor.
Ella: También he visto a los supervivientes y a los que estaban en el vientre de las mujeres de Hiroshima.
Ella: He visto la paciencia, la inocencia, la aparente dulzura con que los supervivientes provisionales de Hiroshima se acomodaban a una suerte tan injusta que la imaginación, generalmente tan fecunda, se cierra ante ellos.
Ella (en voz baja) : Oye... Sé... Lo sé todo . Todo sigue.
Él: Nada . No sabes nada .
Ella: Las mujeres corren peligro de dar a luz niños deformes, monstruos, pero todo sigue. Los hombres corren el peligro de verse atacados de esterilidad, pero todo sigue. La lluvia da miedo. Lluvias de cenizas sobre las aguas del Pacífico. Las aguas del Pacífico matan. Han muerto pescadores del Pacífico. La comida da miedo. Se tira la comida de toda una ciudad. Se tira la comida de ciudades enteras. Toda una ciudad monta en cólera. Ciudades enteras montan en cólera.
Ella: ¿Contra quién, la cólera de las ciudades enteras? La cólera de las ciudades enteras tanto si lo quieres como si no, contra la desigualdad establecida como principio por ciertos pueblos contra otros pueblos, contra la desigualdad establecida como principio por otras razas contra otras razas, contra la desigualdad establecida como principio por ciertas clases contra otras clases.
Ella (en voz baja) : Oye... Igual que tú, yo conozco el olvido.
Él: No, tú no conoces el olvido.
Ella: Igual que tú, estoy dotada de memoria. Y conozco el olvido.
Él: No, tú no estás dotada de memoria.
Ella: Como tú, yo también intenté luchar con todas mis fuerzas contra el olvido. Y he olvidado, como tú. Como tú, deseé tener una memoria inconsolable, una memoria de sombras y de piedra.
Ella: Luché por mi cuenta, con todas mis fuerzas, cada día, contra el horror de comprender ya en absoluto el por qué de recordar. Y como tú, he olvidado...
Ella: ¿A qué negar la evidente necesidad de la memoria...?
Ella: ... Oye... Sé más. Esto se repetirá. Doscientos mil muertos. Ochenta mil heridos. En nueve segundos. Estas cifras son oficiales. Aquello se repetirá.
Ella: Habrá diez mil grados en la tierra. Diez mil soles, dirán. El asfalto arderá.
Ella: Reinará un profundo desorden. Toda una ciudad será levantada del suelo y volverá a caer convertida en cenizas...

"HIROSHIMA, MON AMOUR" de ALAIN RESNAIS (1.959) guión de MARGUERITE DURAS.

jueves, 11 de mayo de 2006

LA ALEGRÍA ES UN DESAFÍO

ÁNGEL GABILONDO, CATEDRÁTICO DE METAFÍSICA

Tengo 57 años. Nací en San Sebastián y vivo en Madrid. Soy rector de la Universidad Autónoma de Madrid. Estoy casado y tengo dos hijos. En política me interesa la innovación, lo atrevido y lo discutible. Creo que no se agota todo lo que hay en lo visible. He dado una conferencia, Artesanos de la belleza de la propia vida, en el CCCB
IMA SANCHÍS - 03/05/2006 - LA VANGUARDIA

- ¿Cómo es una vida bella? -

Desde luego, no es un artefacto, algo acabado y perfecto. Yo creo que somos artífices de nuestra vida, nos vamos haciendo.

- Elija un camino. -

La sencillez. Hay que saber mucho para ser sencillo. La sencillez es un resultado; la simpleza, un estado primario. Me gustaría llegar un día a ser sencillo.

- Ya, pero cómo se llega... -

Desde luego, no solo. Uno solo se ensimisma, se enquista, se vuelve autosuficiente. Creo que necesitamos el desafío permanente de los otros, esa irrupción que nos trastorna y nos altera pero que nos hace vivir.

- ¿Y por qué el otro nos trastorna tanto? -

Porque no es otro como yo. En general, no buscamos al otro, buscamos a alguien como nosotros para no vernos muy desafiados. Pero es una suerte encontrarse en la vida con alguien otro de verdad.

- La alegría no ha de reducirse a la llamada felicidad, dice usted. -

Hay éticas de la felicidad e incluso anuncios televisivos en los que se dice: "Sopas hechas con felicidad"; parece que es un ingrediente, un aditamento. Yo más bien apostaría por la alegría, por el gozo de vivir.

- La alegría se cultiva. -

La alegría es un desafío, algo por lo que hay que luchar. No comparto los discursos quejosos de esa gente que está siempre gimiendo y lamentándose. En una sociedad blanda, acomodada y tibia, la queja se ha convertido en un instrumento que se utiliza con demasiada facilidad.

- La alegría da trabajo. -

Hay que emprender cosas, sí. En general, estamos muy aburridos y eso nos produce una vida gris más o menos adornada. La alegría nace del desafío, de correr el peligro de vivir, de hacer de la vida una experiencia.

- Pensar diferente, ¿cómo hacerlo? -

Hay que vincular el pensar al vivir y a nuestras palabras. De manera que digamos lo que pensamos, y pensemos y hagamos lo que decimos. Un pensamiento implicado en la transformación de uno mismo es muy innovador, porque el pensamiento empieza por transformarse a sí mismo.

- La curiosidad mueve al pensamiento. -

Sí, la curiosidad de ver si podemos ser otros que los que somos. Pero nuestro pensamiento es poco curioso, tiende a confirmar lo que ya existe en vez de crear algo distinto.

- ¿Y cómo sacudirse las telarañas? -

En general, somos seres aislados y tenemos una idea de las relaciones personales como si fueran un movimiento que lleva del uno al otro, una especie de yo yo y tú tú. Si uno piensa en Platón, entenderá que el eros,el amor, es el movimiento que pone a los dos en la dirección de algo.

- Hasta que empiezan las diferencias. -

Encontrarse a alguien con quien iniciar un itinerario hacia alguna cosa distinta es un regalo fantástico, pero hay que valorarlo. Deberíamos ser como los archipiélagos, conjunto de islas unidas por lo que las separa.

- Después de tantos filósofos, ¿cuáles son las conclusiones que le han servido para vivir? -

La intensidad es un factor determinante para la dicha. No se trata, creo, de hacer grandes cosas extravagantes, sino de cuidar los detalles de la vida, darle mucha intensidad a cada instante. Piense en esos animales que viven cuarenta horas...

- ¿Dar belleza a nuestra forma de vivir? -

Sí, pero en el sentido griego, en el que la bondad, la belleza y el bien están unidos. Nosotros hemos hecho de la belleza algo esteticista que se logra a través de una especie de ataques de atletismo, pero hemos olvidado cultivar nuestro modo de ser.

- Me sabe mal hablar en este contexto de la muerte. -

Entonces, mejor hablar como mortales, entendiendo que cada instante no volverá. A mí, ser mortal me ayuda a vivir gozosamente y a darle a cada instante mucha fuerza.

- Es curioso que nos empeñemos en vivir como si no fuéramos mortales. -

Porque vivir como un mortal es exigente. A mí, lo que me asusta es echar a perder la vida. En realidad, nos pasamos la vida ocultando que somos efímeros (en griego: seres de un día). Somos cotidianos, como el pan, como el periódico; somos de a diario, y esto no es un obstáculo para la alegría.

- Pero nos llenamos la vida de obstáculos. -

Toda una gran operación para olvidar. Desde luego, esa obsesión por el trabajo sólo puede deberse a algún tipo de olvido. Si tuviéramos esa conciencia de finitud, probablemente seríamos menos productivos.

- ¿Qué idea le sacude a usted más? -

Lo que más me ha costado es aceptar la soledad y el fastidio constitutivo, aprender a vivir con esa incomodidad que llevamos dentro y que casi siempre le achacamos a otro.

- Sé a qué incomodidad se refiere, ¿pero de qué se trata? -

Somos personas quebradas, no somos seres acabados ni plenos. Hay que entender que no es que tengas una herida, sino que eres una herida. La gente que no asume eso suele ser muy quejumbrosa y culpa a los demás de esa incomodidad que nos constituye.

- ¿Qué hacer cuando sufres? -

Luchar: yo no creo que el sufrimiento redima. El sufrimiento destruye y deteriora, no construye. A mí, la gente sin placer me parece peligrosa y resentida, me asusta.

- ¿Con qué idea se quedaría? -

El lenguaje es un principio extraordinario de realidad; el pensamiento es acción. El problema es que hay mucha actividad y poca acción, porque una acción produce una verdadera transformación de sí y de lo que hay; las actividades no transforman nada.

miércoles, 10 de mayo de 2006

EL VERDUGO

Sólo a un maestro como Luis García Berlanga y al genial guionista Rafael Azcona, se les podía ocurrir afrontar un tema tan duro como la pena de muerte desde el humor negro más corrosivo, a la vez que respetuoso. Así, entre carcajadas (especialmente en mi caso en la escena de la boda, con Alfredo Landa de sacristán, y en el de la aparición de la pareja de guardia civiles en una barca en medio del espectáculo acuático- musical de las Cuevas del Drach en Palma, en las que casi lloro de risa) vemos al pobre Amadeo, que pasa de ser un digno enterrador a aprendiz de verdugo, con la intermediación de su suegro, el inolvidable Pepe Isbert y de propia su mujer. Prácticamente le tienen que arrastrar al patíbulo, como si él fuera el justiciable, en la escena final de la película, en la que Berlanga consigue que se te borre la sonrisa de la cara ante la desesperación del protagonista, convertido en asesino a su pesar.

GARROTE VIL

¡Tan! ¡Tan! ¡Tan! Canta el martillo,
el garrote alzando están,
canta en el campo un cuclillo,
y las estrellas se van
al compás del estribillo
con que repica el martillo:
¡Tan! ¡Tan! ¡Tan!

El patíbulo destaca
trágico, nocturno y gris,
la ronda de la petaca
sigue a la ronda de anís,
pica tabaco la faca
y el patíbulo destaca
sobre el alba flor de lis.

Áspera copla remota
que rasguea un guitarrón
se escucha. Grito de jota
del morapio peleón.
El cabileño patriota
canta la canción remota
de las glorias de Aragón.

Apicarada pelambre
al pie del garrote vil,
se solaza muerta de hambre.
Da vayas al alguacil,
y con un rumor de enjambre
acoge hostil la pelambre
a la hostil Guardia Civil.

Un gitano vende churros
al socaire de un corral,
asoman flautistas burros
las orejas al bardal,
y en el corro de baturros
el gitano de los churros
beatifica al criminal.

El reo espera en capilla,
reza un clérigo en latín,
llora una vela amarilla,
y el sentenciado da fin
a la amarilla tortilla
de yerbas. Fue a la capilla
la cena del cafetín.

Canta en la plaza el martillo,
el verdugo gana el pan,
un paño enluta el banquillo.
Como el paño es catalán,
se está volviendo amarillo
al son que canta el martillo.
¡Tan! ¡Tan! ¡Tan!


RAMÓN MARÍA DEL VALLE- INCLÁN

martes, 9 de mayo de 2006

LEVIATÁN



LOUISE BROOKS

"Sólo Sachs podía informarle a uno de que cuando la actriz de cine Louise Brooks crecía en una pequeña ciudad de Kansas a principios de siglo, su vecina y compañera de juegos era Vivian Vance, la misma mujer que más tarde actuó en el programa de televisión Te quiero, Lucy. Le divertía haber descubierto esto: que los dos extremos de la femineidad americana, la vampiresa y la maruja, la diablesa libidinosa y el ama de casa desaliñada, hubiesen empezado en el mismo lugar, en la misma calle polvorienta de Estados Unidos"

PAUL AUSTER. "Leviatán"



VIVIAN VANCE

lunes, 8 de mayo de 2006

INFANCIA




Ya lo he dicho en otra ocasión , me encantan las novelas con voz narrativa infantil, me maravilla cómo un adulto puede retrotraerse a sus primeros años y captar tan bien la forma de ver el mundo de los pequeños, quizás porque me ayudan a recordar cómo era yo de niña, algo que no viene mal de vez en cuando. Por eso estoy disfrutando tanto de "Infancia" de Coetzee, una novela autobiográfica en la que el ganador del Premio Nobel rememora sus niñez en la Sudáfrica de los años 50.

"La infancia, dice la Enciclopedia de los niños, es un tiempo de dicha inocente, que debe pasarse en los prados entre ranúnculos dorados y conejitos, o bien junto a una chimenea, absorto en la lectura de un cuento. Esta visión de la infancia le es completamente ajena. Nada de lo que experimenta en Worcester, ya sea en casa o en el colegio, lo lleva a pensar que la infancia sea otra cosa que un tiempo en el que se aprietan los dientes y se aguanta."

J.M.COETZEE

domingo, 7 de mayo de 2006

ALMAS



" Algunos dicen que las almas llegan a juntarse en algún lugar del bosque, formando una gran corriente que discurre entre las copas de los árboles, como un río sin peso en el que los pájaros se sumergen como lo hacen los peces en los ríos reales;
otros, que descienden al interior de la tierra, aprovechando los pozos y las grutas, y que se unen allá abajo en grandes lagos tranquilos, y que a través de las raíces de las plantas regresan al bosque en forma de brotes nuevos, flores y semillas.


Otros, que se transforman en pequeñas llamas, que siguen ardiendo por un tiempo en los lugares más recónditos, y que es imprescindible que siempre haya alguna encendida, pues, si todas llegaran a apagarse a la vez, la vida del mundo cesaría con ellas.


Y otros, en fin, aseguran que las almas ascienden por el aire y que se reúnen en un lugar remoto que hay por encima de las nubes. Un lugar lleno de seres bellísimos, blancos y mansos, como los copos de nieve, que se encargan de recogerlas, y que las guardan en grandes cajones, como hacen las amas de casa con los manteles, las toallas y la ropa de cama. "


GUSTAVO MARTÍN GARZO. Tres cuentos de hadas

* GEORGIA O´KEEFFE "White Rose with Larkspur"

jueves, 4 de mayo de 2006

FRONTERAS


" Vagabundeé mentalmente durante varias semanas, buscando la manera de empezar. Toda vida es inexplicable, me repetía. Por muchos hechos que cuenten; por muchos datos que se muestren, lo esencial se resiste a ser contado. Decir que fulanito nació aquí y fue allá; que hizo esto y aquello, que se casó con esta mujer y tuvo estos hijos, que vivió, que murió, que dejo tras sí estos libros o esta batalla o ese puente, nada de eso nos dice mucho. Todos queremos que nos cuenten historias, y las escuchamos del mismo modo que las escuchábamos de niños. Nos imaginamos la verdadera historia dentro de las palabras y para hacer esto sustituimos a la persona del relato, fingiendo que podemos entenderle porque nos entendemos a nosotros mismos. Esto es una superchería. Existimos para nosotros mismos, quizá, y a veces incluso vislumbramos quiénes somos, pero al final nunca podemos estar seguros, y mientras nuestras vidas continúan; nos volvemos cada vez más opacos; más y más conscientes de nuestra propia incoherencia. Nadie puede cruzar la frontera que lo separa del otro por la sencilla razón de que nadie puede tener acceso a si mismo. "


PAUL AUSTER "La habitación cerrada"

miércoles, 3 de mayo de 2006

EL GRAN TURTURRO



Tremendo ataque de risa me provocó el otro día el gran Turturro(redecilla de pelo incluida) en su recreación de el temible jugador de bolos Jesús Quintana en la genial "El gran Lebowsky" de los Hermanos Cohen, ignoro cómo pudo hacer esas escenas sin romper a reir él también, jajaja :D


martes, 2 de mayo de 2006

LOCURA

* GOYA . "El sueño de la razón produce monstruos"

" LOCO- Afectado por algún grado de independencia intelectual; disconforme con las normas convencionales que rigen el pensamiento, el lenguaje y la acción, normas éstas que los "cuerdos" o "conformes" produjeron tomándose como medida a sí mismos. Que discrepa con la mayoría; en resumen, extraordinario."


AMBROSE BIERCE. "Diccionario del diablo"

"Con todo esto, no he querido decir que cualquier extravagancia o desvarío mental tenga que recibir el nombre de locura. No se debe tomar como loco a un legañoso que confunde un mulo con un asno, ni a quien se exalta ante un mal poema que considera perfecto. Pero si alguien de una manera habitual o constante yerra en sus sentidos y en sus juicios, habrá que considerarlo muy cerca de la locura. [...] Sucede que, muchas veces, este tipo de locura tiende al placer y proporciona una notable alegría tanto a los que la padecen como [a] aquellos que son testigos de la misma [...] Veréis con frecuencia que el más loco se ríe con más ganas del que lo es menos".

ERASMO DE ROTTERDAM
 
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