martes, 2 de enero de 2007

CARY GRANT


"¡El presidente Kennedy me llamó una vez desde la Casa Blanca precisamente por esa razón!" Cary Grant respondía a mi pregunta con una amplia sonrisa, alegre como un niño. Estábamos en el salón de su casa de Beverly Hills a finales de enero de 1985, poco después de que cumpliese ochenta y un años; aunque de ninguna manera aparentaba mucho más de sesenta y cinco. Sólo vivió un año y medio más. "¡Mi secretaria me dijo que el Presidente estaba al teléfono!" prosiguió Grant, alegremente, "así que, naturalmente, yo tenía curiosidad por saber por qué me llamaba y cogí el teléfono inmediatamente; dije: "!Ho-la!". El Presidente dijo que lamentaba molestarme (yo no dije que para nada) y él me dijo que su hermano, el Fiscal General, estaba también al teléfono. Así que dije "Ho-la", también al Fiscal General y, entonces, les pregunté que qué podía haer yo por ellos. "Bueno," dijo el Presidente, "Bobby y yo estábamos aquí charlando en el Despacho Oval, y los dos pensábamos que teníamos muchas ganas de escuchar la voz de Cary Grant, ¡Queríamos oirte hablar!".

Yo mismo, durante los veinticinco años que tuve la suerte de conocer a la estrella, incluso por aquel entonces legendaria, le llamaba por teléfono con cualquier pretexto, a veces símplemente por el mismo motivo que los dos Kennedy en el Despacho Oval. No era sólo su voz y su acento inglés de Bristol, sino también su inconfundible manera de hablar lo que poseía un tremendo efecto vigorizante (te hacía sentirte entusiasmado y feliz), que era como generalmente solía sonar cuando hablaba. Pocas veces me pareció que sonase deprimido o vengativo. (...)

¿Cuántos actores quedan hoy con una vez y ademanes tan inconfundibles cómo para que los telefonee un Presidente? Aparte de Clint Eastwood, Jerry Lewis, Barbra Streisand o Jack Nicholson, ¿quien queda?. En los tiempos del antiguo sistema de estudios (aproximadamente entre 1912 y 1962), Cary Grant estaba hecho a medida para ser una estrella de cine: era alto, terriblemente atractivo y hablaba de forma peculiar, con cierto acento inglés cuya procedencia exacta uno no podía determinar. Su inconfundible voz y sus enormes y expresivos ojos oscuros("está todo en sus ojos" solía decir Orson Welles)nacieron para ser grabados y filmados. Y entonces, un montón de gente de inmenso talento, creativa, brillante e inteligente se puso a trabajar con, o en, Cary Grant. Un puñado de magníficos realizadores cinematográficos (entre ellos Leo McCarey, Howard Hawks, Alfred Hitchcock y George Cuckor), y varios guionistas geniales tuvieron un enorme impacto en este personaje que llegó a ser famoso con el nombre de Cary Grant. Como actor, que era en lo que nadie le había ayudado, tenía una fantástica habilidad para encarnar todos los numerosos puntos de vista diferentes que le pidieran, para convertirse en un actor prácticamente sin limitaciones, un ideal romántico, un protagonista cómico y dramático de sorprendente versatilidad. Una carrera como la de Cary, de principio a fin y para siempre, resulta algo inconcebible hoy en día.

PETER BOGDANOVICH "Las estrellas de Hollywood. Retratos y conversaciones".

* Os recomiendo este libro (que yo me he autoregalado unos días antes de Reyes) a todos los amantes del cine clásico, es una verdadera gozada leerlo.

** En cuanto al genial Cary Grant, poco queda que añadir, nadie ha llevado como él una bata femenina en la gran pantalla :).


19 comentarios:

Anónimo dijo...

Y rompo mi norma por segunda vez (y última) que mañana no podré...

Decía Hitchcock que Cary Grant resultaba elegante incluso con un huevo podrido estampado en la cara. Y qué razón tenía. Era único en ese sentido. Tuvo clase incluso para despedirse del cine en aquella película situada en los juegos olímpicos de Tokyo, "Apartamento para tres". La única vez que se quedó sin la chica, tras retirse elegantemente de la lucha frente a su rival más jóven y más apropiado para ella.

Su vitalidad y optimismo sorprende teniendo en cuenta la terrible infancia que padeció. De hecho, estuvo enganchado al LSD toda su vida. Según él, con fines medicinales. En otros palabros, para superar sus traumas, que no eran pocos.

Bueno, ya sé que no tendrá nada que ver conque lo hayas comprado, pero me gustaría creer que la recomendación del libro de Bogdanovich que hice hace tiempo, influyó en alguien. :p

desconvencida dijo...

Alex, espero entonces que pasado mañana vuelvas a romper esa norma autoimpuesta que te impide postear el primero ;).

Cuánta razón tenía Hitchcock, estaba elegante en todo tipo de circunstancias... con o sin LSD, jajajaja... (eso explica sólo en parte su afabilidad y empatia).

Sin duda mi subconsciente había retenido las referencias en tu blog (el post dedicado a River Phoenix o el de Jerry Lewis) sobre el libro de Bogdanovich, me lo estoy pasando muy bien leyéndolo...

Anónimo dijo...

Estaba enganchado al LSD???...no tenia ni idea!.Alex , y que és eso de que no se permite usted postear el primero?.Pero si és un pequeño lujo compartir el café madrugador con ustedes..no me priven de mis inofensivos vicios. Hoy és martes , como un lunes .. este és mi teclado...esta és mi pantalla , esta mi mesa de despacho , estos mis posteos favoritos....Feliz 2007 queridos ...estén preparados para todas las cosas buenas y hermosas que les van a ocurrir en este nuevo año , recién , recién estrenadito ...mmmmm , se han fijado lo bién que huelen , por dentro las hojas de los libros por abrir? Uffff! y todas esas películas que quedan por ver...!!!Bueno os tengo que contar en el rincón perdido del mundo donde he pasado estos diez dias de maravillosas vacaciones...os van a entrar unas tremendas ganas de ir.

desconvencida dijo...

¿No ves, Alex? Hazle caso a Mary Kate, esta chica sabe... ;)

Pero Mary Kate, ¿a qué esperas a contarnos dónde has estado? Ya os he dado yo bastante envidia con el viaje a Italia :)

conde-duque dijo...

Le quedaba mejor el traje, aunque se le llenase de polvo:
http://www.youtube.com/watch?v=g458w2X9uHc

atikus dijo...

Pues si que esta la gente madrugadora y ademas trabajadora!! ya veo que posteo tarde jeje...

Pues yo con esta peli "La fiera de mi Niña" me lío con la de "Historias de Filadelfia" porque los protas son los mismos y aunque H.H. y G.K. no tienen estilos iguales en este caso parece que la fuerza de los actores ( y que actores señores!!) supera a la de los directores (y que directores!!)

En qualquier caso hay poquitos pero que muy poquitos actores que puedan estar al nivel de C.Grant, una maravilla y un placer de actor sin duda, aunque creo que le queda mejor la chaqueta

Feliz AÑO !!

desconvencida dijo...

jaja, conde-duque, sin duda le quedaba mejor el traje que las transparencias ;).

atikus, y que lo digas, aquí estamos hoy todos pringando, no sé tú ;)

Qué dos buenas comedias mencionas, ¡me encantan! Tengo "La fiera de mi niña" en dvd, a ver si veo de nuevo "Historias de Filadelfia", que hace años de la última vez...
Feliz año a ti también :)

El detective amaestrado dijo...

Tu magnífico post, aparte de incidir en lo bueno que era Cary Grant, me confirma una idea que lleva años dándome vueltas, el presidente Kennedy, ¿qué demonios hacía en horas de trabajo?¿Seducir a Marilyn?¿Llamar a Cary Grant por teléfono?
Oye, y que curioso, ambas aficciones las compartía con su hermano. A ver si hemos descubierto una nueva perversión en el católico presidente...

desconvencida dijo...

jajaja, detective, te juro que pensé lo mismo al leer este texto, menudo cachondeo se traía JFK en el Despacho Oval, aunque es mejor entretenerse en hacer llamaditas a actores famosos que dedicarse a invadir países extranjeros, ejem...

atikus dijo...

Pues si estoy currando, aunque más relajado estos días.

La verdad es que cualquiera tendría celos del presidente Kenedy si no fuera por su final prematuro.
Me estan entrando ganas de pillarme una biorafía suya...

desconvencida dijo...

Después de tu pasión confesa por Marilyn Monroe no me extraña :D

Alicia Liddell dijo...

Le quedaba el traje,y sobre todo el frac, de maravilla. Pero estaba especialmente seductor cuando no le quedaba más remedio que ponerse un salto de cama con plumas y corretear por el bosque en pos de un fox terrier juguetón que había escondido un hueso de dinosaurio.
Adorable.

desconvencida dijo...

Yo no lo hubiera dicho mejor ;)

Está claro que después del lema "Pon un Sam Shepard" en tu vida, que acuñé el año pasado (gracias a Mary Kate), el de este año va a ser "Pon un Cary Grant en tu vida", aunque no sé yo, no es cuestión de frustrarse,visto el panorama, jajaja ;)

Carles Rull dijo...

Si alguna vez me hiciera un 'lifting' de fotografía, no tengo ninguna duda que sería por el de Cary Grant!

desconvencida dijo...

jaja, me ha hecho gracia eso del "lifting de fotografía" :D

Anónimo dijo...

jo¡ siempre llego tarde a tus post¡¡¡
Por cierto, pregunta, q Grant os gusta más el de comedias como las citadas con anterioridad (se os han olvidado Arsénico por compasión o Me siento rejuvenecer, o el de suspense Encadenados o atrapa a un ladrón? Yo lo tengo claro, pero quiero ver más respuestas¡¡
ME apunto el libro a la (demasiado) larga lista de compras, aunq se tendrá q pelear con Sexo, mentiras y Hollywood de Peter Biskind. Feliz año a todos.
PD: de mayor quiero ser Cary Grant

desconvencida dijo...

así es, (porno), eso te pasa por no visitarme a diario,jajajaja :P

Ya sabía yo que hablando de Cary Grant te dejarías caer por aquí ;)

En cuanto a tu pregunta, mmmmm, me gusta Grant siempre, quizás le prefiero con el aire socarrón de sus comedias, pero en las de intriga como "Encandenados" no está nada mal tampoco... ¡es el hombre! :)

El libro es imprescindible, apúntalo el primero de la lista...

Alicia Liddell dijo...

¡Ay! Muchas gracias por la secuencia del salto de cama.

Estaba igual de bien en comedias que en intrigas, como en Sospecha. Qué inquietante.

desconvencida dijo...

De nada, Alicia, me parto de risa siempre que recuerdo "La fiera de mi niña", películas como esa te pueden alegrar un día gris...

 
Free counter and web stats