"Como es natural mañana escribiré para Jazz Hot una crónica del concierto de esta noche. Pero aquí, con esta taquigrafía garabateada sobre una rodilla en los intervalos, no siento el menor deseo de hablar como crítico, es decir de sancionar comparativamente. Sé muy bien que para mí Johnny ha dejado de ser un jazzman y que su genio musical es como una fachada, algo que todo el mundo puede llegar a comprender y admirar pero que encubre otra cosa, y esa otra cosa es lo único que debería importarme, quizá porque es lo único que verdaderamente le importa a Johnny.
Es fácil decirlo, mientras soy todavía la música de Johnny. Cuando se enfría... ¿Por qué no podré hacer como él, por qué no podré tirarme de cabeza contra pared? Antepongo minuciosamente las palabras a la realidad que pretenden describirme, me escudo en consideraciones y sospechas que no son más que una estúpida dialéctica. Me parece comprender por qué la plegaria reclama instintivamente el caer de rodillas. El cambio de posición es el símbolo de un cambio en la voz, en lo que la voz va a articular, en lo articulado mismo. Cuando llego al punto de atisbar ese cambio, las cosas que hasta un segundo antes me habían parecido arbitrarias se llenan de sentido profundo, se simplifican extraordinariamente y al mismo tiempo se ahondan. Ni Marcel ni Art se han dado cuenta ayer de que Johnny no estaba loco cuando se sacó los zapatos en la sala de grabación. Johnny necesitaba en ese instante tocar el suelo con su piel, atarse a la tierra de la que su música era una confirmación y no una fuga. Porque también siento esto en Johnny, y es que no huye de nada, no se droga para huir como la mayoría de los viciosos, no toca el saxo para agazaparse detrás de un foso de música, no se pasa semanas encerrado en las clínicas psiquiátricas para sentirse al abrigo de las presiones que es incapaz de soportar. Hasta su estilo, lo más auténtico en él, ese estilo que merece nombres absurdos sin necesitar de ninguno, prueba que el arte de Johnny no es una sustitución ni una completación. Johnny ha abandonado el lenguaje hot más o menos corriente hasta hace diez años, porque ese lenguaje violentamente erótico era demasiado pasivo para él. En su caso el deseo se antepone al placer y lo frustra, porque el deseo le exige avanzar, buscar, negando por adelantado los encuentros fáciles del jazz tradicional. Por eso, creo, a Johnny no le gustan gran cosa los blues, donde el masoquismo y las nostalgias... Pero de todo esto ya he hablado en mi libro, mostrando cómo la renuncia a la satisfacción inmediata indujo a Johnny a elaborar un lenguaje que él y otros músicos están llevando hoy a sus últimas posibilidades. Este jazz desecha todo erotismo fácil, todo wagnerianismo por decirlo así, para situarse en un plano aparentemente desasido donde la música queda en absoluta libertad, así como la pintura sustraída a lo representativo queda en libertad para no ser más que pintura. Pero entonces, dueño de una música que no facilita los orgasmos ni las nostalgias, de una música que me gustaría poder llamar metafísica, Johnny parece contar con ella para explorarse, para morder en la realidad que se le escapa todos los días. Veo ahí la alta paradoja de su estilo, su agresiva eficacia. Incapaz de satisfacerse, vale como un acicate continuo, una construcción infinita cuyo placer no está en el remate sino en la reiteración exploradora, en el ejemplo de facultades que dejan atrás lo prontamente humano sin perder humanidad. Y cuando Johnny se pierde como esta noche en la creación continua de su música, sé muy bien que no está escapando de nada. lr a un encuentro no puede ser nunca escapar, aunque releguemos cada vez el lugar de la cita; y en cuanto a lo que pueda quedarse atrás, Johnny lo ignora o lo desprecia soberanamente. La marquesa, por ejemplo, cree que Johnny teme la miseria, sin darse cuenta de que lo único que Johnny puede temer es no encontrarse una chuleta al alcance del cuchillo cuando se le da la gana de comerla, o una cama cuando tiene sueño, o cien dólares en la cartera cuando le parece normal ser dueño de cien dólares. Johnny nó se mueve en un mundo de abstracciones como nosotros; por eso su música, esa admirable música que he escuchado esta noche, no tiene nada de abstracta. Pero sólo él puede hacer el recuento de lo que ha cosechado mientras tocaba, y probablemente ya estará en otra cosa, perdiéndose en una nueva conjetura o en una nueva sospecha. Sus conquistas son como un sueño, las olvida al despertar cuando los aplausos lo traen de vuelta, a él que anda tan lejos viviendo su cuarto de hora de minuto y medio."
JULIO CORTÁZAR "El perseguidor"
*Nadie mejor que Cortazar para describir la magia del jazz y de Charlie Parker.
Cata de vinos Albariños, celebrando que Cambados es la Ciudad española del
Vino 2024
-
El municipio pontevedrés de cambados, es durante todo el año 2024 la *Ciudad
Española del Vino.* Este distintivo fue creado por la Asociación Española
d...
Hace 2 días.
17 comentarios:
DICEN Y DIGO QUE LO MEJOR LO HISO CLINT EASTWOOD!
Un icono, nadie tocó mejor "April in Paris" que él. Y sí, el tío Clint (que como buen aficionado al jazz admira profundamente a Charlie) lo bordó en "Bird". Y de paso se ganó el reconocimiento de la crítica a pesar de que ya había rodado media docena de películas estimables. Y alguna sobresaliente.
Terminarás administrándote Cortázar en vena... :p
ALEX: CORTÁZAR NO ES EL ÚNICO. BENEDETTI, ONNETTI... Y MÁS! MENOS NERUDA POR QUE LO ODIO POR VENDIDO. PREFIERO A HUIDOBRO.... SIEMPRE FIEL! AUNQUE LES DUELA!!!!
LA FOTO DEL EASTWOOD ES GENIAL PARA QUIENES APRENDIMOS DE ESO DE IMÁGENES FIJAS! EN UNA AE1 REVELANDO EN CUARTO OSCURO POR HORAS!
Cruce de caminos entre dos grandes maestros. Solo ellos saben reconocer el verdadero talento oculto bajo el virtuosismo.
Muy bello.
Un beso
Parker, enormísimo cronopio. Y enorme cinematográficamente hablando Forrest Whitaker empapándose del personaje, vampirizándolo. Decía Tete Montoliu, ese pianista al que poco caso se le hizo, que había aprendido mucho del jazz leyendo a Cortázar, pero no de los cuentos con temática jazzera, sino de los otros.
Un beso
Desde luego, preciosa descripción de Cortazar. Reconozco que el Jazz no me gusta tanto como a tí; que envidia ver como disfruta un músico de Jazz con su música y como puede tocar en una banda sin hacer el rídiculo hasta su vejez.
Pues yo no puedo con Charlie Parker. Dame Coltrane, dame Davis, dame Coleman, dame Melendi... pero Parker... debe ser por las ediciones baratas que tengo, que suenan a rayos..
Nunca te comento, Amaya pero ya te dije que me pasaba de vez en cuando por aquí, desde que vi tu enlace en lo de Futuro Bloguero.
Sí que tenía ganas de decirte que tienes un gusto espléndido, musical, cinematográfico y literario y que Desconvencida tiene muchísima clase.
muchos besos para ti y la furia.
Te leo,
J.
que bien que los amigos blogueros entren en nuestras casas y en las de nuestros amigos y unos y otros nos conozcamos...
Endogamia..... que no nepotismo.
besos
* Alex, como bien habéis dicho tú y Cabezotas, nadie como Eastwood para llevar a la gran pantalla la vida de Parker... y nadie como Cortázar para plasmar con maestría en un relato su admiración por él (no hace falta que me lo administre, Julito ya corre por mis venas :).
*Gracias Oceano difuso, un beso :)
* Julio Narrow, qué bonita cita de Montoliu, no la conocía, me ha gustado mucho.
* atikus, me gusta mucho el jazz, sí, aunque reconozco que soy poco entendida en el tema... sí que es una gozada ver a músicos de avanzada edad sobre el escenario, la verdad...
* jajaja, Mondo Gitane, tendrás que hacerte con una buena edición... nadie puede resistirse a él :)
* Muchísimas gracias por tus palabras, J. me dan muchos ánimos para seguir con el blog en momentos como éste, en los que el trabajo agobiante y la falta de conexión por las noches (casi todas las noches, que es cuando suelo preparar mis post, a ver si me pongo las pilas e instalo ADSL en la nueva casa) apenas me dejan tiempo para dedicarle al blog. Un beso :)
* Claro que si, FB, es lo divertido de los blogs, la endogamia bloguera :)
La sombra de Cortázar es realmente alargada...Besos.
A mí me gusta Neruda.
Quiénes se amaron como nosotros? Busquemos las antiguas cenizas del corazón quemado
y allí que caigan uno por uno nuestros besos
hasta que resucite la flor deshabitada.
Amemos el amor que consumió su fruto
y descendió a la tierra con rostro y poderío:
tú y yo somos la luz que continúa,
su inquebrantable espiga delicada.
Al amor sepultado por tanto tiempo frío,
por nieve y primavera, por olvido y otoño,
acerquemos la luz de una nueva manzana.
Y tanto, Lula...:)
Bonito poema, tarta de manzana, ademas habla de manzanas :D
Sí, me gusta porque habla de manzanas. No de la luz de una nueva mañana sino de la luz de una nueva manzana...
Enrique Morente hizo una versión curiosa de este soneto, pero quien mejor lo canta es su hija Estrella.
http://www.youtube.com/watch?v=tFFzCDs47lg
WOW¡¡¡AMAYA QUE PLACER¡¡¡DIOS MIO ANONADADO ESTOY¡¡NO PUEDO ESCRIBIR MUCHO CON ESTA TOS, PERO UN PLACER LEER, Y VER COMO LA FAMILIA BLOGUERA CRECE Y CRECE, A MI ME GUSTAN MCUHO LAS MANZANAS, LA FRUTA POR ANTONOMASIA PARA LOS DELICADOS COMO YO, JAJA,Y MUY DIGESTIVA, ASADA,CRUDA, DE PASTEL, DE MERMELADA, WOW¡¡ DICHOSA MANZANA,HABIA QUE HABLAR DE ELLA, PRECIOSA MANZANA GRACIAS A TI PECAMOS TODOS¡¡¡UMMM O NO??
,FELIZ MAÑANA SIGAN, SIGAN, ME GUSTA MUCHO NERUDA A MI TAMBIEN,.INFINITOS ABRAZOS Y BESOS COLIRODS DE PASION. PEPON
* Gracias por el video, tarta, me encanta como canta Estrella Morente....
* JAJAJA, PEPON, ME HA GUSTADO MUCHO TU HOMENAJE A LA MANZANA, TOMA YA! :D
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