Toda mi ropa huele a cuando estabas.
Sería al abrazarte -no lo entiendo-
o que estuviste cerca y se quedó prendido.
Si arrimo mi nariz al hombro o a la manga,
te respiro.
Al ponerme la chaqueta, en la solapa,
y en el cuello de un jersey que no abriga.
Aroma de placer, de feromonas,
de recostarme en ti mientras dormías.
Por mucho que la lave, mi ropa lo conserva:
es un perfume dulce que me alivia
como vestir mi carne con tu piel.
Y está durando más que mi recuerdo.
Tu rostro en mi memoria se disipa,
casi puedo decir que he olvidado tu cuerpo
y sigo respirándote en las prendas
que, al tiempo que me visten, te desnudan.
Pero la ropa es mía.
De tanto olerte en mí, tu olor es mío.
Tu olor era mi olor desde el principio,
fue siempre de mi cuerpo, no del tuyo,
de un cuerpo que lo tengo a todas horas
para quererlo entero como jamás te quise
y olerlo de los pies a la cabeza.
Es el olor de todas mis edades,
del niño absorto y puro,
del claro adolescente eléctrico y espeso,
de un joven con insomnio que soñaba
fantasmas del amor, y es también el olor
que al transpirar mis sueños
dejaron en las sábanas.
Quién sabe tú a qué aspiras sin este efluvio mío,
sin mi esencial fragancia.
Estando en compañía, serás siempre la ausente
igual que si te fueras o no hubieras llegado.
Pues no olerás a nada, no dejarás recuerdo
ni podrás despertar auténtico deseo
ni embalsamar las yemas de los dedos
que un día te acaricien
con un perfume físico y concreto.
Serás para el olfato de los otros
como un espejo para los vampiros.
Y yo atesoraré con más fe que codicia
este perfume dulce de mi cuerpo
que descubrí contigo.
Si quieres existir, respíralo de nuevo.
LEOPOLDO ALAS "La posesión del miedo" (1.996)
* Los fotogramas pertenecen a la película "Brokeback Mountain". Otros post sobre la película:
BROKEBACK MOUNTAIN
HEATH LEGER
16 comentarios:
Estupendo poema, y aún más estupenda película. Una de las escenas más bellas de los últimos años.
Nada hay más agradable que el olor del ser querido en cualquiera de sus ropas.
Siempre, claro está, que tenga la buena costumbre de ducharse regularmente xD
Besos :)
Así es, Le Poinçonneur... no hay nada como oler a la persona amada, y luego rastrear su olor en tu propia ropa, las sábanas... se nota que soy una gran olisqueadora :)
Es una escena preciosa, de las más bonitas. El poema también. Y el no querer ducharse para no borrar a la otra persona, qué?
Fue quizás mi amigo más querido, me ha emocionado leer su poema que me lo regaló de su puño y letra y lo tengo enmarcado. Aquel Agosto que se fue me quedé mucho más sola, pero sobre todo ahora no sé con quién hablar de todo lo que nos asustaba.
Gracias, era mi hermano del alma, mediopensionista cómo decía él.
Un abrazo
* Emily, eso también lo he pensado alguna vez (aunque por poco tiempo, jeje, que hay que mantener una cierta higiene para socializar :).
* marcela-edith, ¡cuánto tiempo! Mil gracias por tu comentario, ha sido muy emocionante. Un beso
El poema no lo conocía, me ha encantado. La película...bueno qué voy a decir, ADORO a Ennis del Mar y Jack Twist y la escena que has elegido también está en mi top ten de los últimos años. Pero de todo de todo, me quedo con el mensaje de Marcela.
Besos.
Ufff..
No puedo ver esa película, Amaya, y no porque no me guste sino todo lo contrario. Es demasiado de verdad.
Aún así es una de las mejores cosas que le ha pasado al mundo ultimamente y Ang Lee va a ir al cielo por haberla hecho.
El poema también es muy bonito.
Un beso :)
* hola princesa, sabía que te gustaría :). El mensaje de marcela ha sido muy especial....
* totalmente de acuerdo contigo, marta, para mi la película es ya un clásico. besos
Me encanta esta película. Tiene grandes momentos.
Uno de mis dramas particulares es que yo -en circunstancias normales: ducha diaria y sin venir de correr un maratón- no tengo apenas olor corporal. No huelo a nada. Igual es que soy vampiro o algo así y no me he enterado xD
* Estoy contigo, Maribel...
* jaja, Le poinçonneur, sí que es un drama, lo mismo le ocurría al protagonista de "El Perfume" si no recuerdo mal....
* Estoy contigo, Maribel...
* jaja, Le poinçonneur, sí que es un drama, lo mismo le ocurría al protagonista de "El Perfume" si no recuerdo mal....
Qué puedo añadir después de los mensajes que ha generado tu posteo. La intensidad de la escena me emocinó la noche que la vi y la sensación aún dura. Fue como si yo mismo pudiese oler la esencia de Jack. Como apasionado del olor la persona amada posa de modo invisible sobre ti, me declaro, como tú, gran olisqueador :p
Desconvencida, la de Brokeback mountain me parece una de las más hermosas historias de amor en el cine,tan intensa como clandestina.La escena de la camisa es desgarradora,al final ¿qué le queda de ese amor limitado a momentos,destinado a la imposibilidad?una foto,una camisa,ese aroma desvanecido con el tiempo.
Gran poema, y que bien rodeado de por las fotografías. Me convenció tu blog desde que llegué a él, así, despistado, buscando...
Ya te lo contaré.
* Troyana, Alex, gracias por vuestros comentarios!
* Matías, en primer lugar bienvenido, espero que estés aquí para quedarte, ya me lo contarás :)
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