CAÓTICA ANA

Reconozco que tenía muchas ganas de ver la nueva película de Julio Medem, "Caótica Ana" , que ha sido esperada por muchos desde que hiciera la polémica "La pelota vasca" (2.003).Por esa razón fui a verla el domingo,y tengo que decir que lo que me encontré no era lo que esperaba...

Sin querer desvelaros el argumento total de la película, puedo deciros que es la historia de Ana, una joven pintora de Ibiza que es descubierta por una mecenas interpretada por Charlotte Rampling, (cuando vi la escena en la que cena con Ana y su padre en su cueva me acordé del final de "Zardoz" , jaja), que le propone viajar a Madrid con una beca y formar parte de un grupo de artistas por ella protegidos. En la Escuela de Arte se hace una amiga (interpretada por Bebe, en un papel tan tan tópico que da un poco de vergüenza ajena), y conoce a un pintor de origen saharaui al que le une una extraña conexión. Tras experimentar una crisis de ansiedad, su mecenas le presenta a una famosa hipnotizadora para que investigue qué es lo que ocurre, y pronto Ana se convierte en el conejillo de indias de ésta y su ayudante, ya que al parecer, al ser sometida a sesiones de hipnosis, Ana es capaz de recordar vidas pasadas que terminaron trágicamente.

Es justo en el final cuando la película, siempre en mi opinión, patina definitivamente. Hasta entonces puede ser más o menos creíble la historia que cuenta (para mi gusto con un guión bastante flojo), pero a partir de ahí (los últimos 20 minutos de la película), se estrella estrepitosamente. La protagonista pasa de ser una dulce y sensible joven a una perra vengadora, y Medem nos deleita con unas escenas de violencia escatológica propias de una película de Tarantino. Yo al menos salí del cine asqueada y sin entender qué había querido expresar el director.